La cuenca Magdalena-Cauca, beneficiada con un proyecto para el uso sostenible de su biodiversidad
“Para que nuestros ríos lleguen sanos al mar”
Recurso Hídrico
El proyecto concentra su ejecución desde la Fundación Natura en 10 sectores específicos de la Macrocuenca Magdalena-Cauca, todos encaminados a favorecer el buen uso, el manejo y la conservación de los ecosistemas acuáticos y su biodiversidad asociada.
Se declararon otras cuatro Áreas Protegidas Regionales que representan 201.610 nuevas hectáreas protegidas asociadas a ecosistemas acuáticos.
La variabilidad altitudinal de la cuenca del Magdalena ha propiciado una gran diversidad de sitios de importancia global para la conservación de especies amenazadas. Sin embargo, desafortunadamente ecosistemas como los dulceacuícolas cuentan con poca protección. Por ello, y como respuesta a esta necesidad, nació el proyecto GEF Magdalena-Cauca Vive.
Su ejecución se inició en enero del 2017 bajo el objetivo principal de contribuir a la conservación y al uso sostenible de la biodiversidad acuática y sus ecosistemas, a través de la mejora de la salud de estos, el cuidado de hábitats prioritarios, el fortalecimiento de la gobernanza y las capacidades locales, y la equidad de género por medio de una estrategia transversal para incentivar la participación de la población en general.
La iniciativa es financiada por el Fondo Mundial del Medio Ambiente (GEF, por sus siglas en inglés), implementada en Colombia por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y ejecutada por la Fundación Natura bajo un trabajo articulado con cuatro socios en cabeza del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), el Fondo Adaptación y la Corporación Autónoma Regional del Río Grande de la Magdalena. El aporte del Fondo es de USD 7.148.145.
“Por medio del proyecto GEF Magdalena-Cauca Vive contribuimos a la recuperación de una de las macrocuencas más importantes para el país, en la que habita el 77 % de la población de Colombia y que nos provee cerca del 50 % de la pesca continental. Trabajamos desde todos los frentes, nuestra meta es la conservación, la restauración, el cuidado del medio ambiente. Ni para el mundo ni para nuestro país estos temas dan espera. El compromiso es permanente y estamos dando pasos importantes”, dijo el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Carlos Eduardo Correa.
Gracias al fortalecimiento de los esquemas de gobernanza local, teniendo como eje central las Áreas Protegidas Regionales (APR), se promueve la integración de procesos y acciones de monitoreo pesquero participativo y la comercialización pesquera y restauración ecológica de 300 hectáreas en torno a acuerdos de conservación. Una parte de estos logros están basados en 35 Pequeñas Iniciativas Comunitarias (PIC), las cuales también se vienen trabajando en conjunto con el Programa de Pequeñas Donaciones del GEF.
Esta es una labor articulada con siete Corporaciones Autónomas Regionales (CAR), por lo que se logró consolidar la declaratoria de cuatro nuevas APR para la macrocuenca, que son los Distritos Regionales de Manejo Integrado (DRMI) Complejo Cenagoso de Zapatosa (Cesar y Magdalena), Corrales y El Ocho (Nechí, Antioquia); Bosques, Mármoles y Pantágoras (Antioquia), y Ciénaga de Barbacoas (Magdalena), que corresponden a 201.610 nuevas hectáreas protegidas asociadas a ecosistemas acuáticos.
“Gracias al apoyo del Fondo Mundial para el Medio Ambiente hemos logrado durante muchos años consolidar un portafolio robusto de proyectos que responda a garantizar el cuidado de nuestra biodiversidad, la lucha contra el cambio climático y el trabajo con las comunidades”, expresó David Olarte Amaya, punto focal operativo del GEF en Colombia y jefe de la Oficina de Asuntos Internacionales del Minambiente.
Fuente:
Junio, 2021