Rafael Gallo Palomo


El Guapileño - Periódico El Guapileño

Rafael Gallo Palomo - El papá de Ríos Tropicales.
Por Camilo Rodríguez Chaverri

El primer título que quise para este artículo fue “El maravilloso loco de El Bajo de El Tigre”, pero después me dio miedo que pareciera irrespetuoso. No lo puse de título pero lo utilicé para arrancar porque sólo los locos transforman el mundo, y sólo las locuras espléndidas y grandiosas nos hacen cambiar. Las locuras de este personaje han sido magníficas para Costa Rica. Son locuras ecologistas y deportivas. Son locuras fuera de serie. Locuras que han sido alegrías y bellas sorpresas para nuestro país.
Cuando uno se encuentra con Rafael Gallo, no se imagina que tiene más de 50 años de edad. Parece un muchacho grande, un adolescente sin edad. La aventura lo ha soplado con su magia y su fuerza. 

Gallo y Palomo

Rafael Gallo Palomo tiene nombre de un personaje de Gabriel García Márquez. Y le hace honor al nombre. Parece un héroe salido de una novela de aventuras. Nació en Estados Unidos, de padres salvadoreños. Creció en El Salvador. Cuando la situación política de su país empeoró, sus papás lo mandaron a estudiar a Estados Unidos. Estudió Ingeniería Industrial en la Universidad de Tennessee. Un día, un amigo lo invitó a un paseo. Así se montó por primera vez en una balsa sobre un río. Después fue parte de una aventura de dieciocho días por el río en El Gran Cañón. Luego anduvo con sus amigos en los ríos de Wyoming, Idaho, Washington State, en Estados Unidos, así como por muchos Estados de Canadá.

Un río lo hechizó

Le hablaron especialmente de dos países: Nueva Zelanda y Costa Rica. No tenía dinero para irse para Nueva Zelanda. Tampoco para Costa Rica. Se fue en vehículo de Tennessee a Florida, donde vivían sus papás, que habían tenido que abandonar El Salvador. El papá era ingeniero agrónomo. Le dio un trabajillo, “una chamba”. Le pagó setecientos cincuenta dólares. Con esa plata se vino para Costa Rica. Poco después, conoció el río Pacuare, lo cautivaron sus aguas tibias y la exuberancia del paisaje. El Pacuare lo hechizó. Supo que quería quedarse aquí para siempre. 
Trabajó en Costa Rica Expediciones, empresa enfocada en traer turistas extranjeros. Pero soñaba con tener una empresa propia para mostrarle sus ríos a los costarricenses. Su amigo Fernando Esquivel, mitad salvadoreño, mitad costarricense, con quien había estudiado de niño, ya vivía en Costa Rica y lo convenció de que iniciaran la empresa juntos. Se fue para Estados Unidos. Su papá le prestó su carro, y manejó de Florida a Tenesse para comprar el equipo necesario y arrancar su empresa. Lo acompañó su amigo Jimmy Nixon. Sólo llevaba plata para dos balsas. Allá le dijeron que tenían otra balsa usada para venderle. Gallo dijo que no tenía más dinero. Y Jimmy, su amigo, replicó, “si querés, yo compro esa balsa y me metés de socio” Así lo hicieron. 

Echar a andar la empresa

Rafael se vino dos días antes que Jimmy para mover los trámites. Cuarenta y ocho horas después, su amigo llegó a Costa Rica con catorce bultos. Contra todos los pronósticos, pasó bien por los puestos de aduana. Entonces, arrancó la empresa. 
Fernando Esquivel se fue a California a capacitarse como guía. A Jimmy Nixon le ofrecieron trabajo como piloto de TACA, donde sigue treinta años después. Rafael Gallo se vio solo en la empresa. Llamó a sus viejos amigos de andar en ríos, una pareja de gringos escaladores y aventureros, Earl y Glena, quienes todavía son pareja tantos años después. 
Ahora sí, arrancó la empresa en serio. Estamos ante el nacimiento de Ríos Tropicales. La empresa que nos ha permitido explorar esas venas vivas de la tierra que son los ríos. Solo había una entrada para Pacuare y era parte de una licencia exclusiva de Costa Rica Expediciones. 
A Rafael Gallo le tocó explorar otros ríos. Es el gran descubridor del río Sarapiquí, con estos fines. También anduvo el Chirripó Atlántico, el Balsa, el Toro Amarillo, el Peñas Blancas, el Telire…

Pacuare y Sarapiquí

Su empresa arrancó con el río Sarapiquí. Eran tres horas de viaje por Vara Blanca, en pésimas condiciones, en una calle sin asfalto. Después encontró otra manera de ingresar al río Pacuare. Bajaban todo el equipo con los bueyes de José Abel Rojas, “Choto” y “Chimbolo”. Acampaban en el playón del río, en la propiedad de Aníbal Obando. Posteriormente le compró ese terreno a Aníbal. Su esposa en ese entonces era Dina Fuentes. Tuvieron quince hijos. Dina vuelve a aparecer más tarde en esta historia.
“El Indio” García le hizo el primer rancho, con el cual dejaron de usar toldos para las tiendas de campaña. “El Indio” también le hizo el segundo y el tercer rancho, con los cuales dejaron de acampar. Ahí mismo conoció a Miguel “Culebra”, otro personaje de novela. Miguel “Culebra” era de Guadalupe, pero había ido a meterse al monte. Se dedicaba a dos actividades: hacía canastos de mimbre y atrapaba serpientes terciopelo. De tiempo en tiempo, salía a vender los canastos y las víboras. Su cliente con las tobobas era el Instituto Clodomiro Picado. Rafael le compró la propiedad a Miguel “Culebra”. Así se fue haciendo más grande su reserva privada, que en la actualidad consta de ochocientas hectáreas. Con Rafael han crecido laboral o profesionalmente los hijos de José Abel Rojas y Aníbal Obando. Han sido guías. Han conocido el mundo. 
Ahora Dina Fuentes, la ex esposa de Aníbal, está al frente de su albergue. Lo maneja con la misma sabiduría con que sacó adelante a sus quince hijos. 

Reservas con apoyo de amigos

Después, Rafael Gallo convenció a una serie de amigos para que colaboraran con su proyecto conservacionista. Le compraron una finca a “Perico”, otro personaje de la zona, y a Miguel González, en cuya finca construyeron el “Centro de Aventura”. A esa propiedad la bautizaron “Finca El Tigre”.
En 1989, publicó un libro en inglés sobre los ríos de Costa Rica. Sabe muchísimo sobre estos templos vivos, serpenteantes, inconmesurables que son los ríos… Dice que el Sarapiquí es muy accesible y suscita una experiencia ecológica, que el Pacuare permite una experiencia llena de aventura, al igual que el Chirripó Atlántico, que es hasta más bonito, pero de difícil acceso.

Deportista y defensor de los ríos

Ha estado en tres campeonatos de rafting en 1991, 1998 y 2011. En 1992, participó como entrenador en Barcelona en el campeonato mundial de kayak. Está en el salón de la fama de los deportes acuáticos. Desde 1986 hasta 1994, fue entrenador en Angostura, donde se preparaban los mejores deportistas del mundo. Eso se acabó con el proyecto hidroeléctrico del ICE, el cual considera responsable de todo un desastre ecológico.
Rafael y su hermano Víctor, quien también es aventurero, acamparon durante varios días en el cañón de dos montañas, para que no ocurriera otra catástrofe. Teófilo de la Torre y Hernán Bravo negociaron y aceptaron que se realizara, por primera vez, un verdadero estudio de impacto ambiental. Rafael atribuye a Pedro Pablo Quirós el hecho de que en el Reventazón no hubiera ocurrido una devastación como la que se dio en Angostura.
En su caminar por el mundo ha promocionado a Costa Rica en el segmento de turismo de aventura y las ferias internacionales, y lo ha posicionado en esta categoría. 
Es presidente de la Red de Reservas Naturales Privadas que tendrá el Congreso de la Alianza Latinoamericana de Reservas en Costa Rica en el mes de noviembre.
Ha sido tan valiente en la defensa de lo mejor de Costa Rica, que hasta ha bajado en balsa por el río Torres, con la esperanza de que su protesta sirva para combatir la doble moral que vivimos en materia de ambiente, que permite que contemos con los ríos más limpios de América, entre ellos el Savegre, que nace al otro lado de la montaña y es como gemelo del Pacuare, y también con los ríos más sucios del continente. Entre ellos el Torres y el María Aguilar.
Rafael Gallo Palomo le hace honor a su nombre: es un personaje fuera de serie, digno de un libro. Su espíritu aventurero ha sido una bendición para el Caribe costarricense y especialmente para nuestros ríos indómitos, bellos, mágicos e ingobernables, nuestros ríos que son aletazos mojados de Dios en esta tierra verde, en esta zona rica y hermosa donde vivimos y soñamos.

 

LIBROS PUBLICADOS

Mayfield, Michael W. & Gallo, Rafael E., “The Rivers of Costa Rica”. Menasha Ridge Press, 1988, U.S.A. 

HONORES Y PREMIOS

Finalista: “Conde Nast World Savers Awards”, 1994-2008 

Presidente, Ríos Tropicales, ganadores de “Best Outfitters on Earth (Mejores Operadores de la Tierra)”, por la Revista de Aventura de National Geographic, 2007 y 2009. 

Presidente, Ríos Tropicales, ganadores del primer Reto Geoturístico: “Celebrating People and Place”, auspiciado por la National Geographic Society y Ashoka Change Makers, 2008 

Presidente, Ríos Tropicales, ganadores de Pioneros de la Prosperidad, Mención Honofífica, Competencia Centro América, 2010. 

Presidente, Ríos Tropicales, ganadores de la Bandera Azul por Ríos con 2 estrellas, 2009 y la Bandera Azul por Espacios Naturales con 3 Banderas, 2009, entregadas por el Gobierno de Costa Rica. Nuevamente ganadores en 2010, 2011, 2012 y 2013. 

Donación Internacional de $400 k para un Proyecto de Desarrollo Sostenible para Costa Rica-Bután otorgado por la ONG Fundecooperación. Rafael lidera este proyecto cooperativo para entrenar a los Butaneses en rafting sostenible y operaciones de viajes de aventura. En Costa Rica, él lidera proyectos de desarrollo sostenible de comunidades y de los miembros que viven y colindan con el Lodge de Rios Tropicales en la región de la cuenca hidrográfica del Pacuare.

Septiembre 2009:

Inducción al Salón de la Fama Internacional del Whitewater por su trayectoria como benefactor. En este salón se honra a legendarios de las aguas blancas (whitewater) cuyos logros han contribuido significativamente tanto al deporte y la conservación de los ríos de aguas blancas como el desarrollo comercial alrededor del mundo.

“Premio Nacional Mérito Profesional en Turismo 2009” otorgado por la Asociación Costarricense de Profesionales en Turismo (ACOPROT) en reconocimiento al esfuerzo, empeño y dedicación de personas que han realizado acciones destacadas en pro de la profesionalización dentro del ámbito turístico.

Galardonado en Innovation por TIES (The International Ecoturism Society), 2010

Diciembre 2010: America Outdoors, ganador del premio Exemplary Service Award, otorgado por el servicio distinguido a la industria y a la asociación American Outdoors.

Director de la organización del Mundial de Rafting en Costa Rica, 2011.

Diciembre 2012: American Outdoors, ganador del premio The Esther Sanborn Environmental Excellence Award, otorgado por el servicio distinguido a la industria y a la asociación American Outdoors.

Agosto 2012: Presidente, Ríos Tropicales, ganadores del premio a nivel latinoamericano de la práctica Reserva Natural Ríos Tropicales (RNRT) como Mejor Práctica de Responsabilidad Social Empresarial 2012 en la categoría Cuidado y preservación del Medio Ambiente, otorgado por el Centro Mexicano para la Filantropía, A.C.

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