ESPERANZA PARA YEMEN
"Para que nuestros ríos lleguen sanos al mar"
El Recurso Hídrico, Conflicto y Cooperación Internacional
Cómo el PNUD trabaja para el futuro en medio del conflicto.
EL FIN DE UNA ERA
Yemen es un país maravillosamente diverso ubicado en el extremo sur de la península arábiga. Impregnado de cultura y rico en Sitios del Patrimonio Mundial, Yemen alguna vez tuvo una economía floreciente, que desempeñó un papel vital en la historia antigua mundial en materia de comercio, arquitectura e innovación. La historia moderna, sin embargo, ha pintado un panorama mucho más devastador para millones de yemeníes.
UN PANORAMA DESOLADOR
Yemen ya era un país pobre antes de que la guerra comenzara en 2015. La gente vivía con un promedio de US$ 4,5 por día y el desempleo rondaba el 52 por ciento.
En 2016, luego de un rápido declive debido al conflicto, el yemení promedio subsistía con un ingreso increíblemente bajo de US$ 1.8 por día, y el desempleo se disparó por encima del 60 por ciento.
La devastación de la guerra
El conflicto en marcha ha tenido un impacto devastador, causando que la pobreza se salga de control y haciendo que el país retroceda décadas en su desarrollo. Muchos niños ya no están yendo a la escuela; hospitales, centrales eléctricas y carreteras han sido destruidos, los pozos se están secando y muchos de los que tienen agua han sido contaminados con bacterias causantes de enfermedades debido a que las personas deben defecar al aire libre.
Millones de personas necesitadas no pueden obtener atención médica y los mercados comunitarios, alguna vez prósperos en todo el país, ya no están operando. Las minas y los artefactos explosivos sin detonar plagan incluso las aldeas más pequeñas, lo que no permite que las personas cultiven o caminen libremente por sus comunidades, o que sus animales pasten en los campos.
Los mercados, las pequeñas empresas y otros posibles medios de subsistencia se han cerrado, lo que limita la capacidad de los yemeníes para generar ingresos. Esto ha dejado a millones de personas sin poder comprar alimentos, agua limpia y combustible para cocinar.
Golpe de realidad
No es que estas cosas no estén disponibles en Yemen; lo están. Pero las personas no tienen suficiente dinero debido a la falta de ingresos, los precios altos y la moneda en constante fluctuación. Lo que alguien pudo comprar el mes pasado, la semana pasada o incluso ayer, hoy está fuera de su alcance. El costo cada vez mayor de los artículos básicos deja la opción de comprar artículos vitales y críticos, como alimentos y agua, fuera del alcance de millones de personas. La falta de ingresos disponibles también significa que las familias no pueden pagar un tratamiento médico para la desnutrición o las enfermedades transmitidas por el agua.
El conflicto en marcha ha tenido un impacto devastador, causando que la pobreza se salga de control y haciendo que el país retroceda décadas en su desarrollo. Muchos niños ya no están yendo a la escuela.
EL PEOR DESASTRE HUMANITARIO DEL MUNDO
Casi el 80% de los yemeníes necesita asistencia y protección. En un país con más de 2.000 kilómetros de costa, sorprendentemente dos tercios de los 333 distritos se encuentran en un estado de pre-hambruna. De los 20 millones de yemeníes que no tienen suficiente alimento, 9,6 millones no saben de dónde vendrá su próxima comida y están al borde de la hambruna. Además, unas 240.000 personas se enfrentan a niveles horribles de hambre y apenas sobreviven.
Alrededor de 3,3 millones de personas se han visto forzadas a abandonar sus hogares debido al conflicto, más de 600.000 de ellas solo durante 2018. El desplazamiento es uno de los factores clave en la hambruna ya que las personas huyen a lugares que no pueden apoyarlos, dejando atrás a sus familias, sus hogares y sus empleos. La peor hambruna se concentra en las áreas que vieron el conflicto más feroz el año pasado.
Los pozos se están secando y muchos de los que tienen agua están contaminados con bacterias que causan enfermedades; el aumento en el costo de los artículos básicos deja la opción de comprar artículos vitales y críticos, como los alimentos y el agua limpia, fuera del alcance de millones de personas.
CON MIRAS AL FUTURO
Hay muchas organizaciones internacionales que trabajan en la crisis humanitaria en Yemen, y el PNUD tiene un papel único en la respuesta que está en marcha. Afrontamos las necesidades inmediatas y actuales durante la crisis en Yemen, mientras seguimos ayudando a las personas, comunidades e instituciones a prepararse para el futuro, una vez que la crisis termine.
Respondemos a la inseguridad alimentaria mediante la ayuda a los pescadores y agricultores para que continúen trabajando. Brindamos el programa Efectivo por Trabajo a personas que no tienen ningún otro ingreso. Promovemos la dignidad de los yemeníes a medida que reconstruyen sus comunidades ladrillo a ladrillo, camino a camino. Proporcionamos energía solar para permitir que las escuelas continúen, los hospitales provean vacunas y las pequeñas empresas funcionen hasta altas horas de la noche.
En 2019 y más allá, junto a nuestros socios implementadores, el PNUD continúa trabajando con Yemen durante una de sus horas más oscuras.
Brindamos Efectivo por Trabajo a personas que no tienen ningún otro ingreso. Promovemos la dignidad de los yemeníes a medida que reconstruyen sus comunidades ladrillo a ladrillo.
Empleo de emergencia
El PNUD involucra a los yemeníes de todo el país en las oportunidades de trabajo temporales y de emergencia, en la construcción y rehabilitación de infraestructura a pequeña escala, tales como pozos, inodoros, carreteras y escuelas, y en la prestación de servicios sociales como terapia de estrés postraumático y asesoramiento nutricional.
Nuestra iniciativa Efectivo por Trabajo y empleo asalariado beneficia a los yemeníes de inmediato al proporcionar ingresos y mejorar el acceso a agua potable, hospitales, escuelas y mercados. Nuestros proyectos de empleo de emergencia se dirigen específicamente a los más vulnerables (jóvenes, mujeres y desplazados) para ayudar a garantizar la posibilidad de un ingreso estable para las poblaciones olvidadas o ignoradas.
Más de 7,1 millones de jornadas laborales creadas para personas afectadas por la crisis
Cerca de 290.000 personas de hogares vulnerables empleadas en programas de Efectivo por Trabajo (beneficiando indirectamente a más de dos millones)
Pequeñas y micro-empresas
El apoyo del PNUD a las pequeñas y micro-empresas impulsa rápidamente los mercados locales y, a largo plazo, genera ingresos y oportunidades de empleo. Ofrecemos financiamiento para capacitaciones y emprendimientos que ayuden a garantizar el éxito de las empresas.
Nueve instituciones de micro-financiamiento recibieron subvenciones para emprendimiento
Más de 7.000 pequeñas y micro-empresas recibieron capacitación y equipamiento
Desarrollo de infraestructura
El prolongado conflicto en Yemen ha requerido una inversión considerable en la reparación, rehabilitación y reconstrucción de instalaciones de salud, escuelas, carreteras, electricidad, agua y otras áreas. La reparación y reconstrucción ayuda a los yemeníes a obtener servicios de salud y nutrición críticos. Permite a los niños continuar asistiendo a la escuela, previene la propagación de enfermedades como el cólera y ayuda a proteger contra la inseguridad alimentaria.
El agua limpia y las carreteras impulsan la economía, traduciéndose en una mayor productividad y ventas para los agricultores, los ganaderos y los pescadores. Asegurar y mejorar estos servicios críticos reduce la necesidad de asistencia humanitaria.
Más de 2,3 millones de personas recibieron agua, educación y carreteras mejoradas
Cerca de 2.500 aulas restauradas
370 kilómetros (aproximadamente 230 millas) de carreteras mejoradas
Más de 4.000 hectáreas (aproximadamente 10 acres) de tierras de cultivo construidas o mejoradas
Más de 220.000 personas se beneficiaron de la nutrición
El desarrollo de infraestructura ha proporcionado a más de 2,3 millones de personas agua limpia, educación y carreteras mejoradas
Energía solar
La demanda de fuentes de energía confiables en Yemen es elevada y está en aumento. Los proyectos solares del PNUD dan prioridad a las instalaciones de salud, las escuelas y la infraestructura de agua y saneamiento. La energía solar también ayuda a mantener los negocios y los mercados en marcha. El PNUD está abordando la inseguridad alimentaria y el riesgo de hambruna en Yemen a través de iniciativas como el bombeo de agua para la irrigación y el acceso a agua limpia para las personas y el ganado.
Más de 167.000 personas ahora tienen acceso a la energía solar
31 escuelas tienen energía solar, permitiendo a los estudiantes estudiar y a los maestros enseñar
2.400 familias ahora pueden tener electricidad en sus hogares durante la noche, operar pequeñas empresas y los niños pueden hacer sus tareas
Nueve supermercados tienen electricidad, lo que les permite funcionar durante más horas
55 establecimientos de salud ahora pueden enfriar sus vacunas y otros medicamentos, haciendo posible brindar atención médica que salva vidas por más tiempo
A través de los proyectos solares del PNUD, 2.400 familias ahora pueden tener electricidad en sus casas durante la noche, operar pequeñas empresas y los niños pueden hacer su tarea.
Acción con minas
El PNUD y sus socios quieren garantizar un entorno más seguro para ayudar a Yemen a reconstruirse mejor y más fuerte que antes.
Trabajamos en todo Yemen para reducir o eliminar el impacto que tienen las municiones explosivas en la población civil, en la infraestructura y en la economía. A través de nuestro socio, el Centro Ejecutivo de Acción de Minas de Yemen (YEMAC, por sus siglas en inglés), apoyamos las operaciones de campo que inspeccionan y despejan las áreas con minas en todo el país. Con casi 1.000 desminadores con capacidad de despliegue, YEMAC tiene equipos en todo el país que trabajan en las áreas más peligrosas.
Se despejaron 6,4 millones de metros cuadrados (aproximadamente 1.581 acres) de tierra
Se han eliminado 120.000 remanentes de guerra explosivos
Se destruyeron 13.230 remanentes de guerra explosivos
A través de nuestro socio, el Centro Ejecutivo de Acción de Minas de Yemen (YEMAC, por sus siglas en inglés), apoyamos las operaciones de campo que inspeccionan y despejan áreas minadas en todo el país.
Al trabajar con las comunidades a través de nuestros socios locales, el PNUD está ayudando a reconstruir la infraestructura básica que ayudará a los yemeníes a recuperarse del conflicto y construir resiliencia ante posibles dificultades en el futuro.
Texto y fotos: PNUD Yemen
Fuente:
Marzo, 2019