Whately: El agua es un tema estratégico para organismos, países y empresas
"Para que nuestros ríos lleguen sanos al mar"
El Agua
Embalse de Cantareira para abastecer a la región de Sao Paulo. EFE/Aaron Cadena Ovalle/Archivo
La situación del agua en el planeta es actualmente un punto estratégico en la agenda de muchos países, organismos internacionales y empresas y ha dejado de ser tratado solo como un problema medioambiental, ha asegurado la arquitecta y urbanista brasileña Marussia Whately.
En entrevista con Efe, la experta en temas de agua y saneamiento ha asegurado que es necesaria una “nueva cultura del agua” ante el “estrés” de los episodios climáticos de sequías o inundaciones que se suceden en todo el planeta.
Whately, que se encuentra en Barcelona para participar en una conferencia del ciclo “Agua y metrópolis” organizado por la Fundación We Are Water y Casa América Cataluña en el Roca Barcelona Gallery, ha recalcado que la crisis del agua en el planeta tiene dos frentes.
Un derecho humano
El primero y más urgente, que indicadores como el último informe de riesgos del Foro Económico Mundial señalan que el agua ha pasado de ser considerado un problema medioambiental a ser un derecho humano.
De hecho, es uno de los diecisiete Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU y factor transversal para los otros dieciséis, ha señalado Whately.
El segundo es la emergencia del tema y la necesidad de actuaciones para enfrentarlo ante la incidencia de la sequía en los incendios que se han registrado en Brasil una cifra récord este año, ha explicado.
Solo en septiembre pasado se registraron 95.000 incendios en diferentes zonas del país, cifra récord según el Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE).
Deforestación de la Amazonía
Pero es la “deforestación en grandes zonas de la Amazonía” uno de los factores que “más influye en los ciclos del agua”, ha manifestado, e insistido que aunque “no está científicamente demostrado cuanta menos flora hay menos capacidad de generar lluvia” se produce.
Y en Brasil la deforestación de la Amazonía es un problema ya que “estamos viviendo un momento políticamente complicado con el actual gobierno”.
El Gobierno del presidente Michel Temer ha dado concesiones a sectores económicos muy “atrasados”, y, entre otros, “la minería tiene la intención de abrir nuevas áreas de producción en la Amazonía”.
La primera, menos flora menos producción de lluvias.
La segunda, la incidencia regional. “La deforestación generará menos humedad en todo el continente porque la tala se está produciendo también en la zona central de Brasil donde hay un ecosistema cerrado, lo que está reduciendo las lluvias que vienen del norte”.
Monocultivos y sequía
“Es la zona más deforestada y se está transformando en una zona de monocultivos para los agronegocios, con un mayor consumo de agua para la irrigación y otros usos”.
Y por último, en el área local, en los lugares donde se ha acabado con la vegetación habrá que observar cómo va a reaccionar la situación en períodos de sequía.
Por todo ello es necesario una “buen y transparente gestión del agua”, ha insistido la arquitecta brasileña, quien ha remarcado en considerarla un bien “público”. Efeverde.
FUENTE:
POR LOURDES UQUILLAS
03 OCTUBRE 2017